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★ El secretario general de UPCN y adjunto de la CGT, Andrés Rodríguez, cuestionó duramente la reforma laboral que impulsa el presidente Javier Milei y aseguró que «no crea empleo genuino». En declaraciones formuladas este jueves en Radio Splendid AM 990, el dirigente gremial desmontó el discurso oficial y defendió la profesionalidad de los empleados estatales.

Crítica al relato anti-estatal

Rodríguez rechazó con firmeza el discurso del Gobierno que pretende instalar la idea de que todo trabajador del Estado «es ñoqui». «Es una falta absoluta de respeto», afirmó el sindicalista, quien reivindicó la tarea de quienes se desempeñan en la administración pública.

En ese sentido, destacó que el Estado «tiene cuadros con gran capacidad y conocimiento de las materias que abarcan», que incluso actúan como «baluarte» para asesorar a gobiernos con «gente inexperta». El dirigente lamentó que se haya expulsado a un montón de personas «útiles» de la administración pública, en clara alusión a las cesantías masivas que caracterizaron la gestión libertaria.

«El camino opuesto al empleo»

Para Rodríguez, lo que verdaderamente crea trabajo es «cuando hay inversiones», tanto del exterior como locales, que «apuestan» a la producción y «generan» polos de desarrollo. Sin embargo, advirtió que el país transita el «camino opuesto»: hay un «achatamiento absoluto de las actividades, cierre de Pequeñas y Medianas Empresas y expulsión de mano de obra».

La radiografía del secretario de UPCN expone la contradicción central del modelo libertario: mientras se promete dinamizar el mercado laboral mediante la flexibilización, la realidad muestra el desmantelamiento del entramado productivo y la destrucción sistemática de puestos de trabajo.

Ajuste financiero sin plan productivo

El dirigente también apuntó contra la ausencia de un «plan económico» coherente en la gestión de Milei. Según su análisis, el Gobierno se limita a una «actitud financiera», enfocada en «solucionar algunas variables macroeconómicas», pero sin atender la «microeconomía» ni la necesidad de trabajo genuino para la población.

Esta distinción resulta clave para comprender el modelo libertario: la obsesión por el equilibrio fiscal y la reducción del déficit no se traduce en desarrollo productivo ni en bienestar para los sectores populares. El ajuste recae sobre trabajadores y pymes, mientras los indicadores de pobreza y desempleo continúan en ascenso.

Una reforma ideológica contra los trabajadores

Rodríguez fue contundente al definir el carácter de la reforma laboral: «Es ideológica y busca atacar a las organizaciones sindicales y disminuir derechos tanto individuales como colectivos de los trabajadores».

La lectura del sindicalista coincide con el análisis de diversos especialistas en derecho laboral, que ven en el proyecto una herramienta para debilitar la capacidad de negociación colectiva y precarizar aún más las condiciones de empleo, en un contexto donde la informalidad ya supera el 40% según datos oficiales.

Puntos clave:

• Andrés Rodríguez, de UPCN y la CGT, calificó la reforma laboral de Milei como un proyecto que no genera empleo genuino
• El dirigente rechazó el discurso oficial que estigmatiza a los empleados públicos y defendió su profesionalidad
• Advirtió sobre el cierre de pymes y la expulsión de trabajadores calificados del Estado
• Señaló que el Gobierno carece de plan económico y solo atiende variables macroeconómicas
• Definió la reforma como «ideológica» y orientada a atacar organizaciones sindicales y reducir derechos laborales