Gracias a la inteligencia elaborada en relación con el mercado del ajo, la Aduana ha delineado un perfil de riesgo consistente en operadores que adquieren la mercadería en efectivo, en grandes cantidades, en el mercado informal; la exportan mediante proveedores sin una capacidad acorde a ese volumen y luego, con la mercadería ya colocada en el exterior, evaden la debida liquidación de divisas en Argentina.
En el caso de Brasil, se frenaron las exportaciones de 97.000 kg de ajo en base a la documentación de las operaciones, cuyo valor combinado ascendía a USD 94.300, el organismo que dirige Guillermo Michel advirtió que los proveedores no tenían capacidades de producción consistentes con los volúmenes de ajo que pretendían exportar. Les requirió que presentaran la debida documentación para justificar su legal tenencia de la misma y dado que no fueron capaces de hacerlo, resolvió la interdicción de la carga que se encontraba en zonas primarias aduaneras.
En el caso de Chile, se frenó una operación de 24 mil kilos de ajo con el país trasandino como destino, dado que el proveedor no pudo justificar la tenencia de la mercadería y no acreditaba una capacidad de producción acorde al volumen de la venta, de 2.400 cajas de 10 kilos cada una.
La Aduana ha denunciado penalmente tanto a los operadores como a los auxiliares de comercio exterior de las maniobras. Asimismo, considera probable que la intención final de las mismas también fuera no liquidar las divisas de las exportaciones. La Aduana está investigando, en conjunto con la Embajada Argentina en Brasil en manos de Daniel Scioli, a la red de personas que, desde ese país, puede haber colaborado con su conciudadano, el ejecutor de la maniobra en Argentina.
El río Paraná registra en Entre Ríos la mayor altura de los últimos 3 años
Se trata de una “mejoría en la perspectiva meteorológica y los caudales previstos desde la cuenca alta” que provocó un crecimiento de la altura del río, lo que prevé que los niveles “se mantendrán en el rango de aguas medias”, aseguró el INA.
El río Paraná mantiene una tendencia de crecida en varios puertos de Entre Ríos durante los últimos meses, se mantiene en el marco de niveles de aguas medias, y se mantendrá en ese rango las próximas semanas, con las mayores alturas de los últimos tres años, informó hoy el Instituto Nacional del Agua (INA).
Ese “gradual ascenso” por efecto del incremento en el derrame semanal de represa Yacyretá, se espera que “continúe aumentando” en el rango de aguas medias, con niveles “superiores a los de los últimos años”, dijo el INA.
Se trata de una “mejoría en la perspectiva meteorológica y los caudales previstos desde la cuenca alta” que provocó un crecimiento de la altura del río, lo que prevé que los niveles “se mantendrán en el rango de aguas medias”, agregó el organismo.
La bajante que experimentó en los últimos años el río fue la “más larga de la historia” y de características extraordinarias por su “magnitud y persistencia”, advirtió el INA, y no tiene un final ni retorno definitivo a la normalidad, a pesar del actual repunte.
A ello se le suma una sequía calificada como “histórica” y “la peor de los últimos 60 años según los registros provinciales”, con efectos “devastadores”; y pocas o nulas lluvias en todo el territorio entrerriano desde 2021.
En Paraná, capital provincial, el río se mantiene hoy en 3,67 metros, arriba del nivel de aguas bajas (2,30) y mayor a su altura promedio histórico para marzo (3,54 metros).
En el noroeste entrerriano, en La Paz, el río Paraná llegó a 4,90 metros de altura hoy, por encima de su límite de aguas bajas (3,20 metros) y de los 4,37 que la Prefectura Naval Argentina (PNA) registró como promedio este mes entre 1996 y 2021.
Donde también se registró una crecida fue en el puerto de Diamante, más al sur de la costa entrerriana, con un nivel de 4 metros, superando los 2,40 metros que marcan las aguas bajas y el promedio histórico de 3,96 de los últimos 25 meses de marzo.
Por otro lado, en Victoria, el río Paraná se encuentra con 3,77 metros, y al igual que el resto de la costa, se mantiene arriba de sus medidas que alertan las aguas bajas (2,60), y de lo registrado como promedio para este mes (3,95 metros).
Además, el INA prevé una mejora para lo que resta de marzo y principios de abril, llegando a 3,87 metros en Paraná; a 5,22 en La Paz; registrando 3,92 metros en el puerto de Diamante; y 3,88 metros en Victoria, unos 80 kilómetros más al sur.
La bajante histórica tuvo su inicio a principios del 2020, un año más tarde tuvo una tendencia alcista sin alcanzar su normalidad, pero volvió a caer a fines del 2021, y provocó notorios cambios en la vida ambiental, económica, productiva y social entrerriana.