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Femicidio

Femicidio de Nora Dalmasso: según un forense, habría tenido sexo consentido al momento del crimen

Al ser consultado sobre el perfil del presunto asesino, Vignolo dijo que “es probable que haya sido un conocido” de la víctima porque “para tener una relación consentida tiene que ser un conocido”.

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Un médico forense declaró este jueves por segunda vez en el juicio por el crimen de Nora Dalmasso, la mujer asesinada en noviembre de 2006 en la ciudad cordobesa de Río Cuarto, y dijo que la víctima tuvo “sexo consentido, probablemente con una persona conocida” antes de morir, con lo que volvió a descartar la hipótesis de un homicidio cometido por un sicario.

Se trata de Mario Vignolo, quien ya había declarado como testigo el 10 de mayo, y que fue nuevamente citado ante el jurado popular y el tribunal técnico por pedido del fiscal Julio Rivero a los efectos de abundar algunos detalles que ya había manifestado en su exposición anterior.

Luego del breve testimonio en el juicio, Vignolo dialogó con la prensa local y dijo que fue convocado para ampliar sobre los resultados científicos que había obtenido durante los estudios forenses.

En ese sentido, el médico forense dijo que le preguntaron si tenía experiencias sobre muertes por encargo y que respondió que estuvo en muchos trabajos realizados en El Salvador, Honduras y México, donde los casos suelen ser “más crueles”, al tiempo que en los hechos de “acá” en los que intervino fueron “por disparo de arma de fuego”.

Al ser consultado sobre el perfil del presunto asesino, Vignolo dijo que “es probable que haya sido un conocido” de la víctima porque “para tener una relación consentida tiene que ser un conocido”.

Asimismo, el testigo descartó que se haya tratado de un crimen por encargo cometido por un sicario al manifestar que “no había lesiones paragenitales ni extragenitales que por lo general suceden con la violación, con sexo violento”; y que las lesiones que tenía Nora era propio de un acto sexual “brusco”.

La persona que cometió el crimen era “temperamental, con fuerza física, agresiva, personalidad fuerte y poseedora”, precisó y agregó y que un sicario no usa una bata para asesinar ni mucho menos la deja en la escena del hecho.

“En ese caso fue improvisado”, por lo tanto “no premeditado”, afirmó Vignolo, quien trabajó en el análisis del protocolo de autopsia realizado sobre el cuerpo de la víctima.

En su testimonio anterior también había sostenido que “el homicidio no estuvo preparado” y que “no hubo premeditación”; sino que pudo haber ocurrido “por algún conflicto que surgió durante la relación” sexual y que el asesino la estranguló mediante una “mecánica mixta con manos y estrangulamiento a lazo”.

También dijo que el hecho de que el asesino haya tapado el cuerpo antes de huir pudo haber sido un acto de “respeto” o “reparador”, y que eso no coincide con el accionar de un sicario o un crimen por encargo.

Vignolo fue el único testigo de la 32da. audiencia del debate, que comenzó el 14 de marzo último, y por tercer día consecutivo el viudo Marcelo Macarrón (62), único acusado sometido a proceso como presunto instigador, se retiró luego de la apertura debido a los problemas de salud que viene padeciendo por una afección coronaria.

La audiencia pasó a cuarto intermedio hasta el próximo martes a las 9, cuando continuarán las testimoniales y la incorporación de pruebas documentales.

Por su parte, Macarrón, médico traumatólogo, está acusado del delito de “homicidio calificado por el vínculo, por alevosía y por precio o promesa remuneratoria en concurso ideal”, calificación legal que contempla la prisión perpetua.

Según la imputación del fiscal Luis Pizarro, en una fecha que no se puede establecer con exactitud, presumiblemente unos meses antes del 25 de noviembre de 2006, Macarrón “en acuerdo delictivo con personas aún no identificadas por la instrucción, instigó el crimen de su mujer por desavenencias matrimoniales”.

Mientras Macarrón se encontraba en la ciudad de Punta del Este participando de un torneo de golf, entre las 20 del 24 de noviembre de 2006 y las 3.15 del 25, al menos una persona ingresó en la casa de Nora (51), en barrio Villa Golf de la ciudad de Río Cuarto, describe la acusación.

El homicida, “aprovechándose de la indefensión de la víctima, aguardó que ésta realice su rutina previa al descanso y abordó a Nora Dalmasso una vez que ésta se encontraba dormida en la habitación de su hija, ubicada en la planta alta de la vivienda”.

En esas circunstancias y “cumpliendo el plan delictivo acordado previamente con Macarrón y sus adláteres, la tomó del cuello, ejerciendo una fuerte presión con sus manos, anulando así toda posibilidad de defensa”.

Seguidamente, “utilizó el cinto de toalla de la bata de baño que se encontraba en la habitación, realizando un ajustado doble lazo alrededor del cuello, ocasionando la muerte por asfixia mecánica”.

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Por último, probablemente como parte del plan criminal, “ordenó la escena con la finalidad de simular un hecho de índole sexual, tras lo cual se retiró del lugar, sin dejar rastro alguno de su persona”, sostienen los hechos del instrumento jurídico.

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Femicidio

Condenan a 16 años de cárcel a jardinero por el “homicidio simple” de una adolescente en Chascomús

El monto de la pena fue estipulado por la jueza Claudia Castro, quien aplicó 16 años de prisión para Néstor Garay (60), considerado culpable por el jurado popular del “homicidio simple” de Navila Serena Garay (15).

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Un jardinero que había llegado a juicio como sospechoso de haber asesinado a mazazos en la cabeza a una adolescente de 15 años y enterrado su cadáver en una casa de fin de semana en la ciudad de Chascomús, en septiembre del 2019, fue condenado hoy a la pena de 16 años de prisión por un jurado popular que consideró que se trató de un “homicidio simple” y no de un femicidio, como había solicitado la fiscalía y la familia de la víctima.

El monto de la pena fue estipulado por la jueza Claudia Castro, quien aplicó 16 años de prisión para Néstor Garay (60), considerado culpable por el jurado popular del “homicidio simple” de Navila Serena Garay (15).

“Estoy totalmente decepcionada porque esperaba que recibiera lo que se merece, estaban todas las pruebas pero el jurado decidió otra cosa”, dijo Débora, madre de la víctima.

Fuentes judiciales informaron que el fiscal Gustavo García acreditó la autoría del hecho y en los alegatos solicitó a los doce jurados que encuentren culpable al jardinero por “homicidio agravado por haber mediado violencia de género (femicidio)”.

Para que sea condenado por ese delito -que prevé la pena de prisión perpetua- el jurado debía decidir de manera unánime, pero finalmente la mayoría se decidió por un “homicidio simple” y también desechó la postura de la defensa que consideró que fue un “homicidio en estado de emoción violenta”.

Según las fuentes, en la audiencia de cesura realizada la semana pasada tras la decisión del jurado popular de que sea considerado un “homicidio simple”, el fiscal García pidió 20 años de cárcel para Garay, cercano a la máxima estipulada para ese delito.

“No es nada eso, esperaba que le dieran prisión perpetua, estoy con mucha bronca”, aseguró la mamá de la adolescente.

El hecho ocurrió el 10 de septiembre de 2019, cuando Navila desapareció de su casa y su cuerpo fue encontrado el 15 de ese mes en una quinta ubicada en la calle Mercedes 707 de Chascomús, donde Garay trabajaba como parquista y jardinero.

De acuerdo a la reconstrucción del hecho, el 10 de septiembre la víctima se fue en un remís hasta la casa de Garay -quien pagó el viaje- y desde allí fue llevada en moto por el acusado hasta el lugar donde fue asesinada.

Según la autopsia, la adolescente recibió 17 mazazos en la cabeza que le provocaron fracturas y hemorragias, aunque no se evidenciaron signos de un ataque sexual.

El pozo donde se encontró el cadáver tenía unos 60 centímetros de profundidad, estaba tapado con escombros, ramas y tierra y fue descubierto por la dueña de casa que vive en Berazategui, llegó de manera sorpresiva y denunció el hecho ante la policía.

Esa mujer contó que días antes Garay la había llamado para pedirle enterrar en su jardín a un perrito muerto.

Los investigadores sospecharon que entre el jardinero y Navila había un trato frecuente, que tenían algún tipo de relación abusiva con fines sexuales y que el imputado había comentado que la chica lo estaba extorsionando para no denunciarlo.

La casa del jardinero Garay fue allanada cuando aún no había aparecido el cadáver, y los policías recordaron que vieron en la propiedad del sospechoso una moto roja y un casco, por lo que buscaron esos elementos al momento de revisar videos.

Así encontraron imágenes del 10 de septiembre donde se vio cómo Garay trasladó la adolescente, a bordo de su moto roja, pasa por la Costanera e ingresó a las 18:27 al Barrio Parque, donde la asesinó.

La policía también encontró en la zona de la Costanera de la laguna, a unos mil metros de la rotonda San Huberto, una bolsa en cuyo interior estaba la mochila simil cuero blanca de Navila, la libreta sanitaria de la adolescente, un buzo color gris, una chalina cuadrille, ropa interior, elementos de higiene y un cargador de celular.

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